Por Facundo Sagardoy
El Teatro Oficial Juan de Vera, emblema arquitectónico y cultural de Corrientes, reabrirá sus puertas este martes luego de una profunda remodelación iniciada durante la pandemia. Con 112 años de historia y declarado monumento histórico, el coliseo fue sometido a obras estructurales, tecnológicas y de accesibilidad que lo posicionan entre los más modernos del país y de la región.
Corrientes cuenta con tradición teatral desde 1860, impulsada por la vida cultural que unía a Buenos Aires y Asunción. El Vera ha sido desde su inauguración un núcleo simbólico de esa historia. Su reapertura marca un nuevo capítulo, en el que el arte se proyecta con renovadas posibilidades técnicas y de inclusión.
La función inaugural será este martes por la noche, bajo el título Renace, con la participación de casi 200 artistas. La obra representa un recorrido por más de un siglo de actividad cultural, y simboliza el comienzo de una nueva etapa. Las funciones del miércoles, abiertas al público, ya cuentan con entradas agotadas.
El directorio del teatro apuesta a que esta reapertura trascienda lo escénico: se proyecta su conversión en centro cultural, con exhibiciones de objetos históricos, fotografías y elementos tecnológicos del pasado. El objetivo es preservar su legado y acercarlo a las nuevas generaciones.
El coliseo ha albergado a artistas como Maya Plisétskaya, Los Niños Cantores de Viena, Julio Bocca, Maximiliano Guerra, y a lo largo del siglo XX fue testigo de estrenos cinematográficos de figuras como Chaplin y Bergman. Esta memoria histórica se entrelaza con la transformación edilicia que lo renueva.
Gracias a convenios interinstitucionales y nueva tecnología, el teatro incorporará dispositivos para personas con discapacidad visual, auditiva y motriz. La inclusión, que no era siquiera imaginable a fines del siglo XIX, se convierte hoy en una política activa impulsada por la modernización.
UNA INTERVENCIÓN INVISIBLE
PERO DECISIVA
Marta Vizcaíno, directora técnica del Teatro Vera, explicó que las intervenciones más importantes no son perceptibles a simple vista, pero resultaron indispensables para la conservación del edificio. «Todo lo que pasó acá en el teatro es una obra civil que no es visible, pero era indispensable para que esto siga en pie», señaló.
Entre las reformas, se destaca la renovación total de instalaciones eléctricas, sanitarias, de iluminación, de sonido, y de redes débiles. Se incorporó conectividad para internet, cámaras de seguridad, streaming y un sistema contra incendios con tanque de reserva de 40.000 litros.
El escenario también fue completamente renovado. Se reemplazaron 90 antiguos puntales de madera por 24 de acero, lo que permitió liberar el subsuelo para nuevos usos. «Hoy la orquesta puede salir desde abajo sin problemas. Antes, eso era impensado», afirmó Vizcaíno.
La escenotecnia ahora está a la altura de teatros como el Colón o el Cervantes. «A nivel tecnología, somos una escala menor, pero más avanzada en este momento, porque hicimos todo desde cero», indicó la arquitecta.
Uno de los cambios más relevantes fue la sustitución de los cables eléctricos originales, algunos de tela y papel de hace cien años. También se incorporaron detectores de humo, cañerías específicas y mecanismos automáticos de seguridad.
La cúpula del teatro, cuya apertura demandará cuatro minutos, fue completamente restaurada. Además, se construyen pasarelas técnicas para facilitar su manipulación sin comprometer la seguridad del personal.
ESPACIOS FUNCIONALES PARA LOS ARTISTAS
El enfoque de esta remodelación consideró no solo al público, sino también a los artistas. Se construyeron camarines nuevos, baños modernos con agua caliente, un ascensor interno y dos salas de ensayo equipadas con espejos, barras y pisos de madera.
«Es la primera vez que se piensa una intervención desde el punto de vista del artista, no solo del público», valoró Vizcaíno. Las salas de ensayo no son espacios adaptados, sino diseñados específicamente para la práctica escénica.
Se conservaron las butacas originales por su notable calidad, mientras que alfombras y pisos fueron restaurados. La acústica original del teatro se mantuvo sin modificaciones debido a su eficiencia comprobada. «La acústica y el nivel de solidez del edificio son impresionantes. No tiene una sola fisura», remarcó la directora técnica.
En el plano estético, la restauración incluyó detalles superficiales pero significativos para la puesta en valor del edificio. Se respetó la estructura patrimonial, reforzando su conservación sin sacrificar funcionalidad.
Parte de los espacios del teatro ya exhiben fotografías y objetos antiguos, como proyectores, que fueron protagonistas de la muestra del centenario. Esta propuesta museográfica se consolidará en el corto plazo como parte de la oferta cultural.
EFICIENCIA TECNOLÓGICA
Y SUSTENTABILIDAD
Con la modernización tecnológica, el teatro podrá programar hasta tres funciones diarias. Las estructuras escénicas, antes manipuladas manualmente, hoy son automatizadas y programables, reduciendo los tiempos de montaje y aumentando la productividad.
«Hoy las varas de luces se suben y bajan con 12 motores, todo automatizado. Antes montar un espectáculo llevaba días, ahora el trabajo será más seguro y productivo», explicó Vizcaíno. Esta eficiencia se traduce en más oportunidades para compañías y artistas locales.
La tecnología LED aplicada es ecológica y más económica en el consumo energético. Vizcaíno subrayó que los nuevos sistemas también requieren capacitación técnica específica, por lo que en agosto se iniciarán talleres dictados por empresas como Nash, Yamaha y Makaya.
Respecto a la inversión, la arquitecta remarcó que «la pintura es lo de menos comparado con la renovación de sonido, iluminación, instalaciones eléctricas y sanitarias». Según su evaluación, el salto tecnológico es lo que más impactará en el futuro del teatro.
El escenario es completamente nuevo, con puente técnico, pisos modernos y estructura metálica reforzada. Aunque aún quedan trabajos menores hasta fin de año, no interrumpirán la programación artística.
SEGURIDAD Y ACCESIBILIDAD
COMO PRIORIDADES
Uno de los principales logros del proceso fue la implementación de un sistema integral contra incendios. «Nunca antes tuvimos esto, ahora por fin podemos presentar un plano en Bomberos», expresó Vizcaíno con satisfacción.
La accesibilidad fue también un eje central. Con la incorporación de tecnología adaptativa, personas con discapacidad podrán disfrutar de las funciones en igualdad de condiciones. Este avance responde a una política cultural inclusiva, aún incipiente en muchos espacios públicos.
Las intervenciones fueron pensadas para prolongar la vida útil del edificio y abrir nuevas posibilidades de gestión. «Esto nos obliga a formarnos todos en el cuidado y preservación de lo nuevo que tenemos», señaló la arquitecta.
Gracias al trabajo articulado con organismos provinciales, el teatro logró una intervención integral que, según Vizcaíno, supera a las reformas por etapas implementadas en otros espacios históricos del país. «Ellos renuevan por etapas, nosotros pudimos hacerlo todo de cero», afirmó.
La inclusión de criterios técnicos modernos en la restauración representa un cambio de paradigma en la gestión del patrimonio arquitectónico. Ya no se trata solo de preservar, sino también de adaptar y potenciar.
UNA NUEVA ETAPA PARA EL VERA
Y LA CULTURA LOCAL
El Teatro Vera inicia una etapa que combina respeto por su legado con una proyección técnica y artística hacia el futuro. Con mejoras estructurales, tecnológicas y museográficas, se consolida como un espacio de referencia nacional.
Su reapertura no solo marca un hito en la historia cultural de Corrientes, sino que también fortalece el desarrollo artístico regional. La renovación permitirá a la provincia albergar espectáculos de mayor envergadura, además de fomentar la formación profesional en áreas técnicas.
A través de una curaduría interna, se planea una gestión cultural que convierta al teatro en un centro de interpretación de su historia, donde se conjuguen arte, tecnología y memoria.
La comunidad artística local ya anticipa una mayor demanda del espacio, mientras que la ciudadanía celebra el retorno de uno de los íconos más queridos de la cultura.