Su nombre pulula constantemente por el inconsciente colectivo y la conversación cotidiana. Una porción gruesa la señala como la culpable de desatar una tormenta familiar, mientras que otros avalan su espíritu ‘libre’. La China Suárez maximizó como nunca su presencia en el imaginario.
El rol en la guerra de Wanda Nara con Mauro Icardi no se apagicua, por el contrario crece a pasos agigantados, como su reciente paseo con las hijas de la famosa, y sin la presencia de su padre, por el barrio chino de la Ciudad de Buenos Aires, que despertó recriminaciones.
En este contexto de análisis de los comportamientos de María Eugenia se produjo un testimonio novedoso. Resulta que Pablo Echarri exteriorizó un halago sorpresivo de la blonda, en su visita al piso de Intrusos. Todo se remontó a su trabajo en conjunto para una serie de plataforma: Camaleón, el pasado no cambia.
Adrián Pallares aprovechó la presencia del prestigioso actor y trató de zambullirlo en el tema del momento y con mucha picardía le exteriorizó: “El día que te llamaron habrás dicho ‘se va a armar un quilombo’, aparte fuiste a ver el estreno con Mauro Icardi”.
PABLO ECHARRI DEFENDIÓ A LA CHINA SUÁREZ
Así, Pablo reflexionó: “Eso que vos decis podría haber sido en otro momento que me preocupara que me toque algo bueno, con una protagonista como ella”. Así llegó la frase que muchos interpretaron como una defensa de Echarri: “Es extraordinariamente popular la China”.
Luego, Pallares intentó nuevamente indagar en los aspectos más faranduleros de María Eugenia y consultó: “¿Y con todo el entorno de ella como lo llevaste?”. De esa manera, el actor eludió con mucha elegancia y esquivó las posibilidades de generar polémica al manifestar: “Soy un muchacho grande, es más fantasías de ustedes”.